lunes, enero 22, 2007

La venganza de los mozos mancos.

Un elefante se balanceaba sobre la tela de una araña, como veía que resistía, fueron a llamar a otro elefante. Dos elefantes se balanceaban sobre la tela de una araña, como veía que resistía, fueron a llamar a otro elefante.... (Ingeniería aplicada. Richard Bracamonte, Bruselas, 1999)

PRIMER ELEFANTE
Comienza el año del Chancho, y como buen entusiasta incomprendido, quien escribe propone la instauración de signos zodiacales alternativos, más afines a nuestras esquivas personalidades, quiero decir a la mía, y a las de mis otros yo. Quirquincho de Lata, Basilisco de Papel Glacé, Ornitorrinco de Ozono, Muchacha Ojos de Papel, Hiena de Agua Finamente Gasificada, y así.

SEGUNDO ELEFANTE
Impresiones desde el Planetario: Gabo Ferro no es humano, por suerte. Y Palo necesita urgente una banda estable. Igual un tipo adorable Palo, caótico, pero adorable. Parecía no saber que lo queríamos tanto.

TERCER ELEFANTE
Sí, vi el Silencio de los Inocentes y no me pareció gran cosa. Y Caché me pareció una cagada, pero a lo mejor el problema es de uno.

CUARTO ELEFANTE
Sabia observación de Osita: Los travestis son todos altos. ¿Por qué no hay travestis petisos? ¿Sólo le ocurre a los altos eso de encontrarse en el cuerpo equivocado? Es una injusticia flagrante para ellas, pobres, porque luego de las operaciones pertinentes, ya no tienen cuerpo de hombre, sino cuerpo de Gabriela Sabatini.

No es del todo cierto que las tuercas tengan un mandato divino que cumplir sobre la Tierra. Es más probable que se traten simplemente de rulos metálicos en negativo.

12 comentarios:

Mantis dijo...

Pero, Chancho, ¿es que no se ha dado cuenta usted todavía de que las tuercas fueron hechas tan sólo para aprovechar lo que quedaba de metal tras haber hecho tornillos?

¿En qué país vive?

Chancho Piluqui dijo...

MANTIS: Un mundo nuevo se ha vislumbrado para mí. He de llevar en mi frente la vergüenza de haber sido ciego tanto tiempo. Edipo un poroto, vea.

Amperio dijo...

Dice el Turienzo que un travesti petiso sería como una tuerca sin rosca.

No, compañero, no me pregunte a mí que no tengo la menor idea de lo que quiso decir el negrito.

nolugareña dijo...

Yo también estaba en el planetario. Capaz que hasta le pisé la mano pasando entre los que estaban sentados. (pisé varias)

En el momento que Gabo cantaba a capella "Dios me pedido un techo" y que se me estaba por erizar el ùltimo pelo de la nariz, un amigo me dice: "Es como muy cabezón" y estallé en una carcajada. (Así que "poraí" me escuchaste)
La potencia de Gabo en vivo es una experiencia para recomendar.

Valle de Muñecas la rompió!

Y a Palo ya lo vi muchas veces en estos ultimos meses, un show que dejó contentos a todos. Para mi que el que le bailaba atrás lo tomó prestado del borda.


Ameba de hojalata.

Chancho Piluqui dijo...

AMPERIO: No importa el sentido real de las palabras del negro, sabemos que son sabias y eso es lo que importa.

NOLUGAREÑA: Mis manos han quedado invictas de pisotones, no así un poco mi entendimiento cuando el olor a un faso de tomillo inundó el ambiente todo.

Y no es que Gabo sea muy cabezón: ¡Gabo es extraterrestre!

Y a Palo yo quiero verlo con la fuerza con la que suena el vivo de los Visitantes. A mí me dio la impresión de que lo levantaron de la siesta y le dijeron "vení, ¿no querés tocarte algo?" y el tipo fue. Igual fue bárbaro, a ese tipo lo adoro.

Flor dijo...

Muy buena la idea de los signos Sr. Chancho. Si eso estuviese vigente (?) yo sería del signo muchacha ojos de papel, o gato negro con anteojos (!).

Jamás sospeché que Gabo fuese humano. Yo lo supe desde un principio.
(La felicidad es artifial, laralaralara). Perdon, tenia ganas de cantar (?).
Cuando habla de Palo, se refiere a Palo Pandolfo?

A mi tampoco me pareció gran cosa El silencio de los inocentes, es mas, prefiero Hannibal. Pero me cagaste la pelicula del fin de semana, por caché lo digo.

Yo vi un solo travesti petiso en mi vida y se parecía a un gnomo, asi que mejor que tengan el cuerpo de la Sabatini (que buena observacion).

Mis saludos Sr. Chancho... un honor leerlo, como siempre. Lo idolatro, sepalo.

Gustavo dijo...

Osita, una mujer muy observadora don Piluqui. Tal vez sepa el por qué pero no se lo dijo.
Y las tuercas no son de este mundo, vienen de otra galaxia en naves extraterrestres, por eso levantan tanta suspicacia; pregúntele a cualquier parapsicólogo.

Yo quiero un signo que desestimule a los adivinólogos de turno, tipo babosa de goma o cucaracha de plástico.

Saludos.

Pvncho dijo...

Recuerdo un periódico rosarino que traía un horóscopo gaucho y que incluía entre otros a un quirquincho no se cuanto.

El ser alto es un requisito para entrar al gremio. Si sos un poco más bajo te inclinás por otras cosas.

PD: empecé a escuchar a Gabo por usted, y se lo agradezco.

Chancho Piluqui dijo...

FLOR: Muy bien eso de "Gato negro con anteojos", estimada. Y Palo es efectivamente Pandolfo.
Ah, no debería usted confiar en el juicio cinematográfico de alguien que en la misma repisa tiene "Delicatessen" de Jeunet y "Harry Potter y el prisionero de Azkaban".
Gracias por la idolatría. La tomaré en cuenta para cuando funde una religión o para cuando venga el apocalipsis, lo que ocurra primero.

GUSTAVO: Así que las tuercas.... pero con razón.... eso lo explica todo. En mi horóscopo ya decía "La solución vendrá de manos de una babosa de goma." Gracias mil, señor.

PVNCHO: Me alegro que la haya gustado Gabo y que sea por la sugerencia de quien escribe. Abrazo, estimado.

el capitán beto dijo...

es feo nacer en un cuerpo equivocado, se lo digo yo que soy un rico encarcelado ene este cuerpo de pobre
(lo dijo el amigo cachetazo a la violencia, y me pareció oportuno este choreo ya que venía al caso)
Y otra pregunta don chancho: ¿por qué si hay hombres con la voz finita, los travestis todo tienen voz gruesa....moooy gruesa?

salud y buenos alimentos

Henrieta R. Hipo dijo...

Osita tiene razón. Hay hombres pequeñitos que podrían pasar desapercibidos como tales con un disfraz de mujer pero a ellos no se les da por ser travestis ¿vio?

Anónimo dijo...

¡Cómo me pude olvidar de "fínamente gasificada"!